En el Tarot, El Mago es la carta número uno de los Arcanos Mayores, simbolizando comienzos con pleno potencial y la habilidad para utilizar las herramientas disponibles para manifestar tus deseos en la realidad. Esta carta es un recordatorio del poder personal y la influencia que uno tiene sobre su propio destino. El Mago está asociado con una gran habilidad, ingenio y recursos, representando también el acto de comunicar de manera efectiva y la conexión entre lo divino y lo terrenal.
El Colgado es la carta número doce de los Arcanos Mayores y a menudo se contempla como el arquetipo de la pausa, la reflexión y la iluminación espiritual. Representa un tiempo de suspension y sacrificio voluntario para ganancia espiritual o mayor entendimiento. Mirando al mundo desde una perspectiva completamente distinta, el mensaje de El Colgado es uno de dejar ir y rendirse a la experiencia, lo cual puede llevar a una transformación y a la liberación de antiguos patrones.
Finalmente, El Diablo se sitúa como la carta número quince de los Arcanos Mayores, y es comúnmente interpretada como una representación de las ataduras y limitaciones que nos auto-imponeprimos. Hace hincapié en nuestras adicciones, nuestros deseos poco saludables y nuestras dependencias emocionales o materialistas. Es una llamada a examinar qué es lo que nos está reteniendo y un recordatorio de que tenemos el poder de liberarnos de las cadenas que nos atan a situaciones que no favorecen nuestro crecimiento.
Al leer El Mago, El Colgado y El Diablo en conjunto, se nos presenta un camino narrativo sobre el potencial humano en su conquista, la necesaria introspección y las tentaciones o desafíos que pueden desviarnos.
Este trío sugiere que tienes ante ti todas las herramientas que necesitas para tener éxito (El Mago) pero para que puedas avanzar hacia la realización de tus metas, debes primero cambiar tu perspectiva o abordar las cosas de una nueva manera (El Colgado). Sin embargo, mientras haces este viaje hacia la auto-realización, es crucial ser consciente de que no caigas bajo la influencia de las tentaciones o hábitos destructivos (El Diablo) que podrían impedirte alcanzar tu verdadero potencial.
El mensaje integral de esta combinación de cartas es uno de empoderamiento personal, instando al consultante a reconocer su poder interno para manifestar cambio y éxito. Es una poderosa llamada para asumir la responsabilidad en el manejo de nuestra propia vida, para reflexionar profundamente sobre nuestros actos y creencias actuales, y para liberarnos de las restricciones autoimpuestas que nos detienen. Esta combinación puede ser interpretada como una trayectoria de encuentro personal e iluminación, en donde el potencial para alcanzar nuestros más altos ideales y deseos está constantemente influenciado por nuestras elecciones conscientes y menos conscientes.