Según la astrología, la fecha en la que nacimos define nuestra personalidad. Nuestros rasgos característicos dependen por lo tanto del signo del zodiaco en que pertenecemos. Cada uno tiene un período en el calendario, y es esencial conocer cuál nuestro signo.
La primera casa del zodíaco corresponde al signo Aries.
Se la considera la casa de la vida porque los que nacen en ella pueden gozar de larga existencia, pues su vitalidad y temperamento les dan una personalidad fogosa; de aquí que el Aries sea emotivo, apasionado y agresivo.
Aries, primer signo del Zodíaco está regido por el planeta Marte. Conocido como el planeta rojo, Marte es el más cercano a la Tierra por el lado más alejado del Sol y uno de los llamados planetas superiores.
Cuando Marte fija su residencia en Aries, las peculiaridades del nativo alcanzan su grado de expresión máxima.
El Sol en Aries
El Sol ocupa el centro de nuestro sistema planetario y tiene, en general, una influencia favorable sobre todo. El astro rey, entra en Aries el 21 de marzo y sale el 20 de abril. Durante este período, un elemento que es el símbolo de la fuerza de la vida y del tiene, en principio, influencia favorable sobre todo lo creado, ya que ocupa el centro planetario; es el símbolo de la fuerza que da vida.
Cuando la posición de Marte y la posición del Sol están cercanas, hasta juntarse, el buen estado de salud y las ganas de vivir de Aries están aseguradas; su apasionamiento obtendrá el fruto deseado.
La Luna en Aries
Al ser la Luna la luminaria más cercana a la Tierra, su influencia es máxima y directa. La feminidad de los Aries, especialmente de las mujeres arianas, se acentúa y opta por la iniciativa frente a la pasividad.
La libertad de la decisión y sus deseos de independencia también crecerán y será muy criticada por eso. Pero las críticas no le impedirán seguir con su empeño de emancipación.
En el hombre Aries, no obstante, la influencia lunar se manifiesta de distinta manera. El ariano tiende, cuando está bajo la influencia lunar, a ser caprichoso y dejar a un lado la razón. Sus acciones serán desordenadas y correrá riesgos inútiles por el simple hecho de que le resulten placenteros.
Júpiter en Aries
Los astrólogos consideran a Júpiter como un planeta de beneficios y alegría.
De esta manera, encontramos en los nativos de Aries una generosidad y una honestidad a toda prueba.
La protección moderada de Júpiter consigue, además, que el nativo de este signo medite y madure cada uno de sus proyectos, a la vez que impregna de cierto espiritualismo determinadas acciones de Aries.
Así, más que en la acción, se esforzará Aries en la reflexión. Este aspecto filosófico puede hacer que aquél se vuelva vanidoso en grado sumo; sobre todo en sus relaciones con los demás, lo que puede conducirle a pensar que es un incomprendido en algunas ocasiones. Aunque, al fin, resurgirá su humanitarismo sobre cualquier otro aspecto negativo que pueda presentársele.
Saturno en Aries
La influencia de Saturno sobre Aries produce en los nativos de este signo un desarrollo de su lado más inhibido. Sin embargo, aunque a primera vista sea negativa, bajo la presencia de Saturno, los arianos encuentran a menudo la entereza y constancia de las que su carácter impulsivo les priva.
Entonces necesitan del silencio y la soledad para planificar esos proyectos que desean llevar a buen puerto desde hace tiempo.
Marte en Aries
Ya se ha indicado que Marte rige a Aries, por tanto aquí las peculiaridades del nativo de este signo alcanzan su grado máximo. Afrontará cualquier contrariedad con la entereza y bravura propias de este signo. Llevará a cabo empresas difíciles y tendrá éxito en la consecución de cualesquiera aventuras que se proponga ya que, bajo la influencia del planeta rojo, los arianos no encuentran freno, ni peligros en ninguna acción.
Pero Marte también es el dios de la guerra y en este período los Aries pueden acusar mayor agresividad en sus relaciones y hacer gala de una impaciencia que les puede traer algún que otro problema.
Palabras como luchador, duro, varonil, vehemente, firme, etc., cobran aquí su más fiel acepción y exacto significado.
Venus en Aries
De los planetas llamados inferiores, que se encuentran entre el Sol y la Tierra, Venus es el más cercano a nuestro planeta. Cuando su órbita lo acerca a la Tierra se puede apreciar a simple vista y deleitarse contemplándolo. Esto hace que desde hace siglos, su atracción se identifique con lo femenino, con la belleza y el mundo de los sentimientos. Además, Venus es el nombre de la diosa romana del amor, la erótica.
Bajo su influencia, los Aries desatan su pasión natural y su impulsividad amorosa y sexual y sus relaciones personales tendrán mucho que ver con un deseo de afecto y cariño, no exentos de cierta sensualidad.
El aspecto externo del nativo de Aries en Venus será, sin lugar a dudas, saludable y atractivo; aunque deberá cuidar su ansia desenfrenada por poseer riquezas y lujo.
Neptuno en Aries
La característica más relevante de la entrada de Neptuno en Aries es la impronta mística con que se revisten los actos, iniciativas y deseos de los nacidos en este período. La política y la religión serán preocupaciones prioritarias del nativo de este signo y le mantendrán en continua zozobra interna.
Pero una desmesurada preocupación por lo utópico hace que a veces el nativo de este signo se evada de la realidad circundante, produciéndose así contradicciones internas que superará con la inspiración y la intuición.
Mercurio en Aries
La posición de Mercurio en la tabla de nacimiento de un Aries indica cierta mentalidad materializada en la consecución de unos fines que se persiguen con valentía y audacia.
Los nervios, puesto que Mercurio rige el sistema nervioso, estarán a flor de piel; por esto, la actividad, la agitación, los argumentos contundentes y el discurso brillante serán características destacadas del nativo de Aries que tenga a Mercurio en su signo. También la posición de Mercurio en Aries creará una acusada predisposición a lo científico y a la filosofía, a lo artístico y a la inventiva.
Urano en Aries
La presencia de Urano en Aries, concede al nativo de este signo un entusiasmo y un fervor vehementes en todas sus acciones. Se acentúa su espíritu independiente y será una época propicia para grandes cambios y transformaciones. La creatividad y la originalidad estarán a flor de piel en los arianos que no aceptarán ver cómo se contradicen sus proposiciones.
En general, la influencia de Saturno será beneficiosa y ayudará a conseguir los objetivos marcados con éxito.
Plutón en Aries
Descubierto hace poco más de cincuenta años, Plutón era el astro de las profundidades y de los abismos. Era el dios del mundo oculto y subterráneo y a él se atribuye todo lo que tenga que ver con lo desconocido.
Su espíritu aventurero se convierte en guía y los arianos buscarán el dato más profundo y determinante de todas sus acciones. Además, su influencia en los nativos de Aries hace que acumulen en su subconsciente algunos estímulos prohibidos por los convencionalismos sociales.
Su agresividad quedará guardada en el estrato más hondo del inconsciente y le llevará a afrontar con indiferencia algunos aspectos de sus relaciones sociales, lo que le va a proporcionar algunas críticas destructivas.
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