En el Tarot Dos de Espadas, vemos a una mujer joven que ha puesto una barrera de espadas en su corazón. Su postura rígida nos habla de su lucha por mantener sus sentimientos bajo control. Ella está defendiéndose de cualquier acercamiento desde el exterior. Nada entra, y nada sale, parece decir.
El Tarot Dos de Espadas trata sobre las barreras que colocamos entre nosotros y los demás y las que creamos dentro de nosotros mismos. Internamente, bloqueamos las emociones y nos negamos a sentirlas. Evitamos mirar la verdad y fingir que todo está bien. Pensamos de una manera, pero sentimos otra. De innumerables maneras, nos separamos de partes de nosotros mismos y tratamos de mantenerlas incluso cuando sabemos que necesitan reconciliarse.
En las lecturas, el Dos de Espadas aparece a menudo cuando no estás dispuesto a aceptar algo de verdad sobre ti o sobre la situación. ¿Qué estás sintiendo realmente? ¿Te estás resistiendo a los sentimientos tiernos porque podrías estar herido? ¿Estás furioso aunque estés sonriendo? ¿A qué te niegas a mirar? Note la venda en esta mujer. Ella no puede mirar la verdad o incluso reconocer que hay problemas.
La barrera más común es un corazón cerrado. Cuando nos cortamos nosotros mismos emocionalmente, nos separamos en la conexión que permite que nuestro amor fluya hacia el exterior. A veces esta acción es necesaria, pero siempre tiene un gran precio. Cada vez que cerramos nuestro corazón, nos resulta más difícil volver a abrir. Otra barrera entre las personas es una situación de punto muerto. Cuando se establecen dos partes en sus posiciones, separadas una de la otra, se produce un punto muerto. Para romperlo, los oponentes deben salir de detrás de sus espadas y escucharse unos a otros. La lección de los Dos de Espadas es que las barreras no son la respuesta. Debemos permanecer abiertos si queremos encontrar paz y plenitud.
Ignora los sentimientos, no desea ver.
Ve ambas caras de la moneda, equilibrio, encrucijadas, punto decisivo